Llevo varios días sin Internet en casa… chaz.:. y en un café Internet, o en la papelería donde amablemente me dan asilo no me inspiro tanto para escribir en el blog.
Entre todo las cosas han estado interesantes… empezaré por hablar un poco sobre Tlaxcala y la conducta animal.
¿que tienen que ver estas dos?
Quizá mucho… el Doceavo curso de bases biológicas de la conducta organizado por la UAT, puede acercarnos a la respuesta. Es la primera vez que asisto y me pareció de lo mejor organizado, y con una amplia variedad de temas para darnos una probadita de algunas de las muchas investigaciones que se están haciendo en el mundo relacionadas con la conducta.
A pesar de que los temas conductuales no son mi fuerte, aprendí mucho y conocí a personajes importantes que sin duda han marcado una huella en esta área de la conservación biológica.
Algunas de las temas más populares entre los asistentes fueron “En busca de la función de una conducta innata: El Bostezo; Conejos copuladotes, ¿Dónde quedó el semen? Y me refiero con populares pues todos los asistentes al curso de una u otra manera en algún momento de las conferencias, en la charla de las comidas apresuradas y noches de caminata en la fría Tlaxcala hacían su aparición con algún comentario teñido de humor.
Entre información, biólogos, psicólogos, halcones o pumas, mexicanos y extranjeros, estudiosos de la conducta y agregados culturales hicimos una de las experiencias más enriquecedoras del año.
Bien por la UAT..:.
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